SIEMBRA DE PASTURAS
Implantar una pastura consociada resulta
costoso, por ello se considera de gran utilidad toda práctica que aumente la
eficiencia de este trabajo, y mejore la productividad de los cultivos.
Se debe tener muy en cuenta la calidad de la
semilla en el momento de su compra y cuando se calibra la sembradora. Conviene
adquirir la de alta pureza y buen poder germinativo, es decir de buen valor
cultural. La dosificación de la sembradora debe considerar la merma de
germinación por calidad de la semilla, aumentándose la densidad de siembra en
el porcentaje necesario.
Aunque se disponga de simiente de buena calidad
y libre de semillas de otras especies, puede resultar decisorio para el éxito
de la pastura que aquélla sea tratada con productos químicos contra hongos e insectos del suelo. En
las leguminosas es prácticamente imprescindible su inoculación y peleteado para
asegurar que las bacterias vivas indicadas para cada especie se hallen en
contacto con las raíces de las plántulas. Los rizobios están en el suelo pero
en cantidad insuficiente y con dudosa capacidad de fijación del nitrógeno
atmosférico.
Es fundamental, para no cometer errores en la
calibración de la sembradora, considerar que el aumento de peso de la semilla
peleteada ronda el 30%.
La época de siembra depende de la temperatura y
humedad del suelo y debe respetarse de acuerdo a cada zona para lograr la buena
germinación de la semilla.
La calibración
de la sembradora para lograr la densidad de siembra deseada es,
naturalmente, uno de los requisitos básicos y que se contempla en el siguiente
ejemplo práctico: se sembrará una pastura compuesta por las siguientes especies
y densidades: alfalfa, 8 kg/ha; trébol rojo, 1 kg/ha; festuca, 3 kg/ha;
cebadilla, 4 kg/ha; trigo como cultivo protector acompañante, 15 kg/ha.
El trigo ocupará rápidamente el terreno,
ganándole a la maleza y protegiendo la pastura en sus primeras etapas de vida
contra vientos y heladas. No obstante debe sembrarse en bajas densidades para
no dar sombra a las especies forrajeras, además de no sembrarlo en las mismas
líneas que las semillas de pastura porque frena el crecimiento de estas últimas
debido a competencia. Cuando el cultivo anual se seca y desaparece, la pastura
ya alcanzó un tamaño respetable como para tener problemas de competencia con
las malezas.
Si se sabe que el valor cultural de la semilla
a sembrar ronda el 96% y se inocula y peletea las leguminosas, se corrigen las
densidades de siembra en función de ambos factores, Cuadro Densidad de siembra.
Si la sembradora en uso es de 3 tolvas (una
para cereales, otra para leguminosas y otra para gramíneas), un buen método de
trabajo consiste en sembrar trigo en hileras distanciadas a 30 cm, las
leguminosas también en hileras a 30 cm, y las gramíneas al voleo, Fig. Sembradora con tres tolvas.
En este caso se tiene una máquina de 17
surcadores distanciados a 7 pulgadas (17-7") equipada con tres tolvas. En
la más grande (trigo) y la intermedia (leguminosas) se anula un dosificador
cada dos y los tubos de descarga se conectan a los surcadores en forma
alternada: uno para trigo, uno para leguminosas. En la tolva más chica se
trabaja con todos los dosificadores y con sus conductores descargando al voleo.
Se colocan las palancas y los engranajes correspondientes para las densidades
de siembra requeridas en cada tolva, y se verifica que los valores obtenidos
sean los correctos de la siguiente manera: 1) cargar cada tolva con su semilla;
2) atar bolsitas de nailon en cada salida de dosificador; 3) recorrer con la
máquina y dosificadores accionados una distancia conocida.
Para simplificar los cálculos se puede andar
una distancia que multiplicada por el ancho de la máquina cubra una superficie
sembrada igual a 10 veces la cantidad de dosificadores. En nuestro caso será
para trigo (anulando un dosificador cada dos): ancho de labor = 9 surcadores x
14" x 0,0254 m / " = 3,20 m.
Distancia
a recorrer = 90 m2 (superficie a cubrir)/ 3,20 m
(ancho de siembra) = 28 m. Entonces se recorren 28 m con cada dosificador
descargando semilla en su bolsa.
La densidad
de siembra será: densidad (kg/ha) = peso de una bolsita (g) x 9
(dosificadores) x 10.000 m2/ha / 90 m2 x 1.000 (g/kg).
El peso en gramos de una bolsita expresa
directamente la densidad en kg/ha cuando la superficie cubierta en la medición
es igual a 10 veces el número de dosificadores. En nuestro caso hay que lograr
para trigo 15,6 g por bolsita, que significarán 15,6 kg/ha; para las
leguminosas, 12,8 g por bolsita ; y para las gramíneas , 7,2 g por bolsita, Cuadro
Densidad de siembra. En este último
caso, y por pesar una cantidad tan pequeña, quizá surjan complicaciones en la
apreciación de la balanza. Para solucionar este problema se puede duplicar o
triplicar la distancia recorrida. Luego habrá que dividir por 2 o por 3 el
resultado para conocer la densidad sembrada. Si fuera necesario corregir la
densidad de alguna tolva se repetirá la medición para verificar el resultado.Densidad de siembra
Si las tolvas están bien armadas y los
dosificadores no tienen fallas, todas las bolsitas que reciben semilla de la
misma tolva, pesarán aproximadamente lo mismo. Cuando se está seguro de que
esto se cumple, colocando una bolsita en un solo dosificador por tolva se
realiza toda la medición.
En los dosificadores de rodillo estriado
externo resultará fácil corregir la densidad variando su capacidad con la
palanca correspondiente. En los dosificadores tipo roldana, con estriado
interno con diafragma fijo, habrá que ajustar la densidad con la relación de
transmisión de movimiento.
En general la densidad depende del tamaño de
las plantas y de las malezas. Si se trabaja con una buena distribución no se
necesita gran cantidad de plantas por metro cuadrado para lograr el máximo
rendimiento del cultivo. Lo fundamental es ocupar
todo el espacio para no lo haga la maleza.
La profundidad
también es decisiva para el éxito de la siembra. Debe ser un trabajo
superficial, de manera que no se agoten las reservas alimenticias de las
pequeñas semillas antes de que se inicie la fotosíntesis. Para evitar que los
surcadores se entierren excesivamente se le abulonan aros metálicos (zunchos)
que actúan como bandas de rodamiento. También suelen utilizarse patines
limitadores de profundidad y se dejan sueltos los resortes de presión de los
mencionados abresurcos.
Siembra
e intersiembra
Actualmente hay en el mercado diversos equipos
y máquinas para sembrar pasturas. Entre ellos se mencionan:
- Una segunda tolva instalada sobre la
sembradora de grano fino de igual ancho que la tolva principal, pero de menor
volumen, con órganos dosificadores del tipo rodillo acanalado de menor tamaño
que los usados para cereal; los tubos de descarga pueden conectarse a los
surcadores o trabajar al voleo.
- Dos tolvas instaladas sobre la sembradora de
grano fino. La tolva de tamaño intermedio para gramíneas y la más pequeña para
leguminosas.
- Tolvas para agregar en máquinas para
labranza, como arados rastra, rastra de doble acción, excéntricas, cultivadores
de campo y cinceles. Sus características son similares a las descriptas y los
dosificadores toman movimiento del eje de los discos o de las ruedas de la
máquina. El equipo realiza simultáneamente una labranza superficial y la
siembra de la forrajera. Son utilizadas en intersiembra de pasturas o en campos
naturales sin roturación total del suelo con el objeto de reforzar la vegetación
existente. Se la calibra de acuerdo con lo explicado en este capítulo.
- Máquinas específicas para intersiembra de
pasturas, que como las sembradoras para siembra directa de soja y trigo están
equipadas con mecanismos para labrar una franja de suelo sin arar - con la
particularidad que dicha franja puede estar cubierta por tapiz vegetal verde
(pradera) -, y asimismo fertilizar y sembrar gramíneas y leguminosas.
A continuación se analizan en síntesis los
elementos con que cuentan los modelos de mayor difusión en nuestro medio para
realizar los mencionados trabajos
Cuchillas,
rotores
Se utilizan para labrar franjas donde luego se
sembrará. Hay modelos de sembradoras que emplean la misma cuchilla acanalada u
ondulada que se aplica en la siembra directa de soja, la cual toma su
movimiento de rotación del contacto con el suelo, y cuya penetración es por
peso. En otras máquinas se ha desarrollado un rotor que toma movimiento desde
la toma de potencia del tractor y que tiene cuchillas en su periferia para
efectuar el corte vertical del suelo. Algunas poseen un leve doblez hacia la
izquierda y otro hacia la derecha a fin de aumentar el ancho de las franjas
labradas.
Sembradora de pasturas: 1 rueda motriz; 2 caja de cambios; 3
tolva de semillas pequeñas (alfalfero); 4 tolva de semillas; 5 tolva de
fertilizante.
Rodillo
acanalado, roldana y esponja
Existen dosificadores diferenciados para
gramíneas y para leguminosas.
En general se utilizan los rodillos con
estriado horizontal, helicoidal, rotor de eje horizontal con esponja
extractora. Lo importante es que puedan dosificar correctamente muy bajas
densidades de semilla por hectárea (desde 1 a 1,5 kg/ha en adelante).
También suelen usarse los rodillos con medias
estrías (tipo Chevron) de distintos tamaños para diferentes semillas y
densidades (por ejemplo con estrías grandes para raigrás, o con estrías chicas
para festuca, cebadilla).
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