2022-06-12

Cosecha: Ajustar la cosechadora y el cabezal con anticipación ahorra plata

 Ajustar con anticipación


Se debe tener muy en claro que el mantenimiento preventivo realizado durante los meses previos a la campaña, es el método más efectivo para disminuir las posibilidades de detención del equipo por desperfectos mecánicos durante los agitados días de cosecha.
Entonces ¿cuánto vale, hablando en plata, una última mirada a la cosechadora antes de comenzar la recolección? Si esa inspección disminuye la probabilidad de perder uno o días por algún desperfecto mecánico, la respuesta es fácil. Multiplique su facturación diaria por los días que no trabaje por tener la máquina en reparación, y conocerá el valor aproximado de ese último chequeo. Además si es usted contratista de cosecha, el dueño del cultivo, es decir su cliente, recordará la demora ocasionada que sin duda tendrá en cuenta en la negociación del próximo año.
La diferencia entre dejar el grano en suelo o llevarlo al silo, puede originarse en esa inspección de último minuto realizada a la cosechadora y al cabezal.
A continuación se presentan algunas sugerencias para comenzar la campaña con el equipo a punto y obtener su máximo rendimiento.



·                Revise su máquina comenzando por la inspección visual de las cadenas y correas. Detecte fisuras y rajaduras en eslabones, desgaste excesivo en cadenas, estiramiento y envejecimiento en correas. Es importante revisar las cadenas del acarreador que conduce el material captado hacia los órganos de trilla, ya que es uno de los puntos que tiene más posibilidades de provocar problemas. Ajuste la tensión de las cadenas midiendo la luz entre las barras acarreadoras y el fondo del canal de alimentación. El valor de dicha luz, debe ser el establecido por el fabricante de la máquina en el manual de uso. Agregue eslabones en las cadenas, si es necesario, y ponga algunos de repuesto en la caja de herramientas.
Asegúrese que la plataforma esté en la mejor condición. Revise las cuchillas y dedos o guardas, y reemplace los elementos gastados. Es bueno llevar a mano repuestos de cuchilla durante la cosecha. Controle que los movimientos hidráulicos del cabezal se realicen sin trabas ni fugas de aceite. (Subir y bajar la plataforma, subir, bajar, adelantar y atrasar el molinete).
Verifique que la presión de los neumáticos sea pareja para que no se entorpezca la nivelación de la barra de corte.
§     Aproveche integralmente su cosechadora. Al trabajar en maíz, deberá recordar que éste exige más potencia que cualquier otro cultivo. Entonces será oportuno recurrir a toda la potencia disponible, sin temor a las sobrecargas. Las cosechadoras han sido diseñadas para entregar el 100 % de su potencia y muchas veces se las utiliza a un 60 o 65 % de su capacidad debido a limitaciones impuestas por las condiciones del trabajo.
§     Ajuste el maicero y extraiga el máximo provecho. Asegúrese que el cultivo circule por el cabezal con flujo uniforme y sin acumulaciones de material. Esto facilitará notablemente el trabajo de la cosechadora.
Si las espigas y el diámetro de los tallos son un poco más grandes que las del último cultivo cosechado, abrir un poco las chapas espigadoras. El objetivo es que las espigas sean separadas de sus tallos antes de ingresar a la máquina y que la separación se produzca en la parte central de los rolos o de las chapas espigadoras. En la puesta a punto del maicero, la regulación de las chapas espigadoras es uno de los detalles de mayor importancia. La distancia entre las mismas, debe ser 2 o 3 mm menor en su parte delantera que en su porción posterior.
Además, el régimen de los rolos debe estar acorde a la velocidad de avance de la cosechadora.
Tenga en cuenta que muchas veces los cabezales son descuidados, cuando en realidad en ellos se originan problemas que se adjudican a la máquina.
§     Encuentre la velocidad óptima de la cosechadora. Esta variará según el rendimiento, variedad y estado del cultivo, la capacidad y regulación de la máquina, el ancho del cabezal y la habilidad del operador. Para obtener el máximo provecho del equipo, busque operar con el máximo de velocidad compatible con pérdidas y daños de grano aceptables. En el instante que comience a sobrecargar la máquina, caerá grano sin trillar por su cola. Además se notarán empachados o atorados, el cabezal y los órganos de trilla, separación y limpieza.
Un método práctico para encontrar la máxima capacidad de cosecha, consiste en regular la velocidad de avance de acuerdo a los valores que señala el monitor de pérdidas.
§     Detecte cuando el cuello de botella es el manejo del grano. Una cosechadora es eficiente si trabaja el 100 % del tiempo. Pero muchas veces los otros componentes el equipo no acompañan a la capacidad de la máquina.
Si se cosecha durante algunas horas, y luego debe esperarse para secar el grano o para que vuelva el camión al lote, se está desperdiciando capacidad de trabajo y aumentando los costos operativos. En tal caso, el cuello de botella no está en la cosechadora, sino en el equipo de manejar grano que le sigue en la secuencia de labores. Entonces habrá que ajustar los detalles necesarios para lograr el máximo aprovechamiento de la máquina.
§     Evalúe sus acoplados graneros. Un acoplado tolva extrae el grano del campo con rapidez. Sin embargo requiere una persona extra para su operación. Entonces es necesario evaluar el costo de tomar esta ayuda y aumentar la presión de trabajo sobre la cosechadora, y ahorrar tiempo, tomando en cuenta la cantidad de grano que tiene para cosechar.
Los acoplados ofrecen algunas ventajas sobre los camiones, como la de entrar en áreas de difícil acceso y tránsito por exceso de humedad. Pero si está pensando en adquirir un acoplado, considere el tamaño de su equipo y el tipo de terreno en el que trabaja. El acoplado más grande tiene más dificultad en transitar por terrenos muy húmedos. Pero también es cierto, que parecen ser preferibles, unidades de mayor capacidad de transporte, a fin de reducir los viajes sobre los lotes, con lo cual se reduce también la compactación del suelo. La capacidad y necesidad de cosecha se mide en ha/hora, y la capacidad de transporte en tn/hora.
§     Use un monitor de pérdidas de grano. Los monitores son mucho más confiables y exactos que hace 10 años. Estos se ajustan de acuerdo a los niveles de pérdidas que se consideran aceptables. Por ejemplo de 0 a 30 kg/ha en soja. Siempre que el nivel de pérdidas exceda dicho valor el monitor avisará, indicando también con exactitud el lugar donde se generan dichas pérdidas de grano.

§     Mire las pérdidas detrás de la máquina. En soja una vez que la máquina ha trabajado la superficie suficiente para cargarse a pleno, mida las pérdidas detrás de la cola. Como regla general se puede recordar que en una soja (cuyos 1.000 granos pesan 190 gramos), si se encuentran caídos en el suelo 30 granos por metro cuadrado, equivalen a 57 kg/ha de pérdida.
En función de la eficacia alcanzada por los equipos, se pueden mantener las pérdidas por debajo del 3 a 4 % del rendimiento del cultivo. Si se sobrepasa dicho valor, detecte su origen y trate de disminuirlas.

Primero controle las pérdidas de pre-cosecha que se originan antes de que la máquina entre en el cultivo. Tallos caídos volcados o plantas tiradas se deben a grandes lluvias, vientos, y altas densidades de siembra. Hay buenos recolectores para levantar cultivos revolcados.

Luego controle las pérdidas del cabezal, que las ubicará bajo la panza de la máquina detenida, (o bien al costado detrás del cabezal). Son originadas en la barra de corte, molinete y tornillo sin fin. Chauchas con granos, adheridas a las plantas en pie luego del pasaje de la plataforma, sugieren que la barra de corte trabaja demasiado alta. Entonces debe revisarse el mecanismo automático que regula la altura de corte.






Luego controle las pérdidas de trilla, separación y limpieza, que las tendrá detrás de la cola.
Para observar las pérdidas en maíz el tratamiento es similar. Camine con la cosechadora en el campo hasta que se cargue normalmente y chequee las pérdidas de cabezal y de cola.
En un maíz bien parado y con la cosechadora bien ajustada, las pérdidas estarán entre 40 y 160 kg/ha. Un gran logro será mantenerlos en menos de 65 kg/ha, unas 22 granos / msi los 1.000 granos pesan 300 gramos.


§     Regule una función a la vez. Si piensa que debe bajar la velocidad de avance, abrir el zarandón, y cambiar el régimen del cilindro de trilla, no haga todo al mismo tiempo. Es necesario realizar un ajuste por vez y evaluar el resultado.


§     Use el manual de operador para armar, ajustar y repara su máquina. Siempre se encuentra el 85 al 90 % de las respuestas a sus problemas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario